El 24 de junio de 2017 se celebró en Madrid un multitudinario concierto de Alejandro Sanz en el estadio Vicente Calderón, concierto que se vio afectado –llegó incluso a empezar con retraso- por una importante cantidad de entradas falsificadas (http://www.elmundo.es/cultura/2017/06/25/594ee3bd268e3e1c1f8b45ac.html) que, además de un significativo perjuicio económico, dieron al traste con las ilusiones de muchos seguidores del artista.
Esto que pudiera parecer una anécdota en realidad supone unos hechos penalmente perseguibles, ya que suponen dos ilícitos penales.
Por un lado, suponen un delito de falsedad en documento privado, porque nuestro Código Penal prevé penas de hasta dos años para quien “simulando un documento en todo o en parte, de manera que induzca a error sobre su autenticidad”.
Igualmente, nos podemos encontrar ante un delito leve de estafa en caso de que se hubiera pagado por las entradas más de 400 euros y, dependiendo de las circunstancias, podríamos estar ante un delito de estafa que pudiera acarrear penas de prisión de hasta tres años.
En las horas posteriores a este evento recibimos diferentes consultas por parte de perjudicados y después se iniciaron acciones penales contra, al menos, una persona. Si tu también te has visto perjudicado por un caso similar y quieres poner en marcha las oportunas acciones, consúltanos.